martes, 28 de abril de 2020

TÚ ELIGES (Reflexión)




En momentos de crisis, de dolor, de pérdida o temor, tú puedes elegir si adoptas una actitud de negación, de derrota, de autodestrucción; o si intentas no dejarte vencer, manteniendo una actitud positiva, con la vista fija en el horizonte, avanzando hacia la luz, abriendo el camino a la esperanza, creciéndote ante las dificultades.

Dios te dio el libre albedrío. Tal vez no puedas controlar los golpes del destino, ni evitar lo que sucede a tu alrededor, pero sí puedes decidir cómo actuar cuando los obstáculos se interponen ante ti.

Eres dueño de tus decisiones, tú eliges cómo reaccionar. Puedes paralizarte y dejarte vencer por la adversidad, o puedes seguir adelante y perseverar hasta la victoria.

Miriam De La Vega Abril 28/ 2020

© Todos los derechos reservados


  

 

domingo, 12 de abril de 2020

ESPERANZA. (Poema de Alexis Valdés)


Lo más hermoso que he escuchado reflejando nuestra situación actual y la esperanza de que la vida después de esta tormenta será mucho mejor a la que conocíamos. Inicialmente, hubo controversias respecto al autor, muchos se lo atribuyeron a Mario Benedetti, pero se ha confirmado que es de la autoría del actor, escritor y humorista cubano Alexis Valdés. Aquí les dejo el video y el poema escrito, que me parece una obra maestra. Disfrútenlo.

Cuando la tormenta pase
Y se amansen los caminos
y seamos sobrevivientes
de un naufragio colectivo.

Con el corazón lloroso
y el destino bendecido
nos sentiremos dichosos
tan solo por estar vivos.

Y le daremos un abrazo
al primer desconocido
y alabaremos la suerte
de conservar un amigo.

Y entonces recordaremos
todo aquello que perdimos
y de una vez aprenderemos
todo lo que no aprendimos.

Ya no tendremos envidia
pues todos habrán sufrido.
Ya no tendremos desidia
Seremos más compasivos.

Valdrá más lo que es de todos
Que lo jamás conseguido
Seremos más generosos
Y mucho más comprometidos

Entenderemos lo frágil
que significa estar vivos
Sudaremos empatía
por quién está y quién se ha ido.

Extrañaremos al viejo
que pedía un peso en el mercado,
que no supimos su nombre
y siempre estuvo a tu lado.

Y quizás el viejo pobre
era tu Dios disfrazado.
Nunca preguntaste el nombre
porque estabas apurado.

Y todo será un milagro
Y todo será un legado
Y se respetará la vida,
la vida que hemos ganado.

Cuando la tormenta pase
te pido Dios, apenado,
que nos devuelvas mejores,
como nos habías soñado.

                  © Alexis Valdés